Hemos recogido 10 propuestas que según los expertos son idóneas para que las personas que sufren de ansiedad mejoren su espacio vital. Pero claro aquí surge la pregunta ¿quién en este mundo demencial no sufre de ansiedad? La verdad es que en mayor o menor grado, salvo excepciones, todo el mundo andamos un poco «atacados» de los nervios. Así que convertir nuestra casa en una especie de burbuja relajante no es tan mala idea.
La decoración de nuestra casa dice mucho de nosotros pero al mismo tiempo también interactúa con nosotros influyéndonos a niveles que en ocasiones no percibimos conscientemente.
Según los expertos en Psicología ambiental es muy conveniente tener plantas en el interior de nuestra casa. La Naturaleza, incluso en su mínima expresión como es una planta de interior, siempre es beneficiosa para nuestra psique.
Los colores tienen una importancia trascendental a la hora de crear un espacio relajante. Pintar las paredes de azul es una buena idea y sobre todo en el dormitorio. El color azul hace que nos baje la presión sanguínea, nos relajemos y nos induce el sueño.
Mantener las estanterías medio vacías es otro consejo para crear un espacio relajante. Una vez más los expertos en Psicología nos advierten que los espacios desordenados aumentan nuestro nivel de cortisol en sangre lo cual nos produce estrés.
Al igual que el desorden resulta abrumador también puede hacerlo un espacio muy recargado. La decoración en tonos neutros y sin estampados recargados y estridentes nos ayudará a sentirnos mejor.
El exceso de ruido y estímulos visuales también es un factor que nos pone alerta innecesariamente. Tener la costumbre de apagar el televisor cuando no lo estamos mirando o incluso esconderlo es también una buena acción para sentirnos más tranquilos.
Las flores frescas proporcionan un ambiente estético que disminuye nuestros niveles de estrés. Tener siempre algunos jarrones con flores frescas en diversas estancias de la casa creará un ambiente muy agradable.
Según el Feng Shui la posición de la cama en la habitación es de gran importancia. Así debe situarse en el lado opuesto al de la puerta de entrada pero no justo enfrente de ella. La explicación parece residir que así queda apartada del flujo de energía.
Está superdemostrado que la luz natural eleva los niveles de serotonina. Este neurotransmisor está directamente relacionado con nuestro estado de ánimo. Hay estudios médicos que relacionan la luz solar con la serotonina presente en nuestro torrente sanguíneo. Tener una buena cantidad de luz natural en casa es por tanto fundamental para encontrarnos bien.
Un estudio de la Escuela de Medicina de la Universidad de Miami relaciona el aroma de la lavanda con un efecto transitorio significativo de la mejora del estado de ánimo. Como vemos esa costumbre inveterada de nuestras abuelas de poner lavanda en la ropa de cama tiene otro efecto positivo además de ahuyentar a las polillas.
Los espejos, según investigadores del Instituto de Psiquiatría de Londres, aumentan la tensión en personas obsesionadas con su apariencia. Es fácil saber si es nuestro caso y poner remedio a ello. Aunque está claro que no podemos prescindir de los espejos absolutamente.