La decoración de nuestro cabecero de la cama es importante no sólo desde el punto de vista decorativo, sino también de lo práctico. Estos 18 ejemplos de cabeceros con forma de chimenea proporcionan, además, un poco de espacio para el almacenamiento a modo de pequeña repisa superior. Ideas geniales para darle a la cama una apariencia única y muy especial.
Si quieres darle un aspecto original y romántico al cabezal de la cama, puedes probar con alguno de estos modelos que te mostramos y que seguro te van a gustar, como si tu cama estuviera dispuesta junto al calor de una chimenea de verdad.
Realizados en madera, los hay de muchos tipos: modernos, antiguos con aspecto vintage, lisos o con relieve, rústicos, blancos, en gris, o en tonos sepia y beige… distintas concepciones para una misma propuesta que combina sabiamente vanguardismo con elementos clásicos.
Para darle mayor personalidad, podemos colocar sobre el propio cabecero espejos o cuadros, acordes con la línea de decoración para no romper el conjunto creado. Si lo preferimos, también se puede pasar una mano de pintura por la madera, de algún color que no desentone.
Podemos conseguir un efecto de antigüedad envejeciendo el material del cabecero con pintura color crema y después, una vez esté seco, pasando la lija. Más tarde aplicamos sobre la superficie manchas de color ocre o verde oscuro, café o pintura sucia. Lo barnizamos y dejamos secar. Con el betún de judea, más popular, se pueden hacer increíbles efectos de madera antigua. Esto es perfecto cuando tenemos una habitación decorada a lo vintage.
En definitiva, modelos para todos los gustos y diferentes estilos decorativos. Verás cómo tu cama te parece un lugar más acogedor y reconfortante gracias a estos pequeños consejos.
Fotos: shelterness.com