Los platos decorados son una buena opción para darle punto final a nuestra decoración de pared. Tal vez lo más corriente sea usarlos en cocinas y comedores aunque como veremos aquí también se pueden usar en cualquier otra estancia de la casa. Y como podemos elegir distintos tipos de platos con muy diferentes ornamentaciones pues los podemos incluir en prácticamente cualquier estilo decorativo.
La disposición de los platos es tan importante como su estampado o color. Aquí tenemos un diseño ascendente que abarca las dos paredes de esta esquina.
También podemos decantarnos por una disposición simétrica como ésta en forma de rombo formada por platos decorados con colores azul y verde.
Cuando agrupamos diversos colores podemos optar por colocarlos de forma más tradicional. Es una buena idea para un espacio donde predominen los colores neutros.
Los diseños atrevidos o impactantes pueden actuar como punto focal.
Un comedor elegante como éste precisa de unos platos a su altura y con una disposición simétrica.
Platos vintage y blancos para rematar esta decoración shabby chic.
A veces sólo necesitamos asomarnos a nuestra despensa y ver todos esos platos que han ido quedándose huérfanos.
Fantástica y colorida colección para revitalizar una decoración excesivamente plana.
Otra propuesta formal para un elegante comedor. La superposición queda fantástica y aporta profundidad.
De un mismo estilo pero en variados colores para decorar una cocina vintage.
Sobre una pared gris o negra una buena colección de platos bien coloridos aportará ese contraste que necesitamos.
Buscar motivos iguales o muy parecidos en los platos y la decoración de la estancia ayudará a crear una bonita composición.
Genial idea en la que se han recortado los platos de los bordes para crear esa sensación de enmarcado que le confiere más relieve al conjunto.
Y abandonamos comedores y cocinas para ver algunos ejemplos en el resto de la casa. Este living de techo alto requiere de una disposición en vertical que lo haga descender un poco visualmente.
En el despacho también podemos decorar con platos como vemos en esta pared azul tan formal. Reducen considerablemente la rigidez del espacio.
El recibidor es otro espacio en el que quedarán muy bien unos platos en la pared. Esta disposición curva sobre el mueble resulta muy agradable.
Estos platos de cerámica japonesa pintada a mano quedarán bien en cualquier ambiente y espacio.
Sobre esta chimenea vemos un conjunto formado por una vajilla de estampado clásico inglés muy acorde con el ambiente.
Aquí estos platos aportan un imprescindible toque de color para animar el espacio que de otra manera quedaría excesivamente soso.
Un toque floral y asimétrico para crear un ambiente relajado en esta sala de estar.