Una silla o sillón colgante de mimbre te ayudará a crear un ambiente relajado y bohemio. Se pueden usar tanto en interior como en exterior y son muy agradables gracias al suave balanceo. Además ahora que se han acabado las vacaciones tal vez podamos alargar su recuerdo con este mueble que siempre recuerda al verano.
Tanto en una decoración boho chic como en una de estilo nórdico nos cabe perfectamente una silla colgante de mimbre. Se pueden colgar del techo o de un soporte metálico.
En un espacio minimalista será un elemento de gran importancia que atraerá todas las miradas.
Cuando la colgamos del techo es precisa una correcta instalación para no llevarnos ningún susto ni armar un estropicio.
Si no queremos complicarnos la vida ni llamar a un profesional para que nos la instale podemos adquirir un soporte para colgarla. Son resistentes y no ocupan demasiado.
La instalación puede ser muy simple, como vemos aquí, con unos ganchos anclados al techo o a una viga y atando la silla con una simple cuerda.
O se puede recurrir a cadenas y muelles para que sean más cómodas y seguras.
Son ideales para tu rinconcito de lectura o para oir música, en definitiva para tu espacio de relax.
Hay modelos de muy diferente factura que nos permitirán cubrir una amplia gama de decoraciones.
Debido a su carácter lúdico y de esparcimiento quedan muy bien en terrazas, balcones y cualquier espacio cercano a unos buenos ventanales. Incluso en el dormitorio quedan fenomenal.
Cumplen un papel decorativo muy importante. Hasta cuando no las usamos para sentarnos.
En un dormitorio juvenil también encajará a la perfección uno de estos muebles. Por su aire desenfadado, por su estructura y por esa sensación de recogimiento y protección que ofrecen.
La forma de estas sillas o sillones de mimbre puede ser muy variable. Las de forma aovada son muy decorativas y te hacen sentir como si estuvieras dentro de un cascarón.
En la terraza o jardín también podemos instalar una silla de mimbre colgante. Aquí podemos colgarlas del techo, de un árbol o usando un soporte metálico.
En la zona de la piscina nos darán un aire exótico y vacacional cien por cien.
También son perfectas para crear un pequeño espacio personal donde relajarnos. Con una alfombra y una mesa auxiliar lo tendremos listo.
Un par de sillas colgantes en el porche invitarán a la conversación más íntima y al acercamiento.
Cuando usemos sillas de mimbre en exterior hemos de asegurarnos que estén diseñadas para ello. Aparte del mimbre y el ratán, más delicados para uso en exterior, también podemos encontrar sus versiones artificiales a partir de resinas que soportan todas las inclemencias meteorológicas.
El porche es un lugar idóneo para colgar uno o varios sillones de mimbre. El movimiento que les imprime el viento las convierte en verdaderas máquinas de relajación.
Dependiendo del tamaño del porche podemos instalar más o menos. Aquí vemos tres sillones colgantes que conforman un original espacio de reunión.
Aunque tal vez por sus características sea un mueble que se presta más a su uso en soledad. Este fantástico rinconcito de relajación y lectura en el jardín así nos lo demuestra.
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adonde encuentro sillas colgantes ? por favor enviar información .gracias