Los espejos son un elemento decorativo con un largo recorrido histórico. Los llevamos usando a este fin desde el siglo XVI, aunque lógicamente se conocían de mucho antes, las viejas civilizaciones romana y egipcia ya los usaban como objeto de tocador. Pero es a partir del siglo siguiente, el XVII, que los maestros venecianos del cristal comienzan a fabricar espejos de grandes dimensiones. Y se convierten en una pieza indispensable para la decoración de los salones. Nosotros, humildemente, sólo queremos mostraros 21 ideas que os ayudarán a decorar con espejos, que os muestren las múltiples facetas que tienen y el gran rendimiento que pueden darnos en la decoración de cualquier estancia.
Seguro que últimamente habéis visto algún que otro ejemplo de mueble recubierto de espejo. Es una forma diferente de usar los espejos y especialmente decorativa.
Otra forma muy original del uso del espejo es tratarlo como si de azulejos se tratará y recubrir con porciones del mismo la pared que queramos. En este ejemplo se ha usado para revestir el frente de la cocina y así de paso aumentar la luminosidad de dicha zona.
A veces nos preguntamos sobre el tamaño del espejo respecto al espacio de una habitación. No hay regla fija, al contrario, se puede instalar un gran espejo, incluso de pared a pared en una estancia de cualquier tamaño.
Otra de las grandes cosas que podemos hacer con los espejos son las composiciones, arriba tenéis un fantástico ejemplo de ello. Y veremos alguno que otro más pues son realmente una forma diferente y divertida de aprovechar la capacidad de reflejar la luz que tienen estos objetos maravillosos que son los espejos.
Los espejos con pátina temporal tienen un encanto especial, el punteado o rayado de la capa trasera metálica, que es la que realmente refleja la luz les da un aspecto mágico y misterioso.
Dos ejemplos más de lo que os decía anteriormente. Las composiciones de cristales, que pueden ser con marco como éstas o sin él como la anterior y alguna más que veremos después, te dan la oportunidad de jugar con las rupturas de la imagen reflejada y lograr así una mirada diferente de la realidad cotidiana.
Un bello espejo quedará bien en cualquier estancia de la casa. Sólo hay que buscar el lugar adecuado para instalarlo, así procuraremos situarlo donde refleje la mayor cantidad de luz posible y que produzca el reflejo más armónico. Por ejemplo en la imagen superior está situado frente a la cama y es una posición un tanto arriesgada, a uno no le apetece verse recién despertado pero bueno hay gustos para todo.
Este espejo con forma de ventana es un auténtico trampantojo y resulta divertido y elegante.
Situar los espejos cerca de una fuente de luz hará que ésta se refleje y multiplique creando un ambiente mucho más luminoso. Me encantan los espejos paralelos de la foto superior, son estupendos y muy originales.
¿Marcos sencillos, para dejar todo el protagonismo al espejo o marcos de rico diseño para complementar y dotar de un hermoso contorno la imagen reflejada? Es otra de las cuestiones a tener en cuenta. Por cierto el espejo de la imagen inmediatamente superior, sí, el de acabado antiguo es realmente un verdadero encanto.
Aprovechar un viejo marco de ventana, recubrir una pared, combinaciones de espejos, espejos colgados o apoyados en el suelo, éstas y muchas más son las formas en que puedes usar los espejos en decoración. Espero que os sirva de ayuda este sucinto repaso para que podáis usar mejor este fantástico recurso decorativo.