No todos tenemos la suerte de vivir en grandes mansiones. La mayoría de nosotros hemos de conformarnos con viviendas normalitas con los metros justos para vivir. Pero incluso en el peor de los casos siempre se puede mejorar y para ello estos cinco trucos te irán de maravilla. Desde luego no ampliarán los metros de tu casa pero harán que la vista se sienta menos constreñida.
El cerebro es un órgano maravilloso pero también se le puede engañar y los decoradores lo saben. El primer consejo es intentar que una estancia parezca tener más altura de la que en realidad tiene. Como ejemplo este salón o living. Pintar el techo de blanco hará que parezca más alto y si colgamos una lámpara también, así como colocar las barras de las cortinas lo más cerca del techo o incluso fijadas en él. A ello podemos sumar que los objetos decorativos sean de diseño vertical. Todo lo que sean líneas rectas apuntando al techo harán que éste nos parezca estar más alto de lo que en realidad está.
Pero también podemos trabajar por debajo. Los muebles, todos, con patas que dejan ver el suelo debajo de ellos es otro truco que alivia la sensación de que una estancia está llena. Ver espacio, incluso debajo de los muebles, nos hace creer que la estancia es mayor.
Puertas y cualquier otro elemento decorativo que sea transparente es una forma magnífica de ampliar la mirada. Si a ello sumamos una buena iluminación y colores claros tenemos mucho ganado en este aspecto, como podemos apreciar en este pequeño cuarto de baño.
Decantarse por algunos muebles que puedan cumplir más de un papel es otra buena estrategia. Esta mesa de centro puede elevarse y convertirse en mesa o barra para tomar algún aperitivo o incluso una cena informal.
El orden es otra forma de ganar espacio. Con buenos armarios y estantes para almacenar los distintos objetos que vamos acumulando conseguiremos aumentar el espacio vital disponible.
Fotos: bhg.com