El cuarto de baño es una de las dependencias de la casa que acusan el paso del tiempo con mayor facilidad. Y en cambio tal vez por la función que cumplen o por la durabilidad de sus materiales es de lo último que pensamos en renovar. Pero es necesario hacerlo porque en ocasiones se les nota demasiado la edad y su aspecto puede resultar chocante como mínimo. Vamos a ver seis sencillas transformaciones que en general no han implicado grandes obras y veremos así lo sencillo que es renovar un cuarto de baño.
ANTES
Este ejemplo es típico, un cuarto de baño que se quedó anclado en los 80 y no muestra ningún interés por ese aspecto plano y sin interés.
DESPUES
Sin tocar la infraestructura técnica, sólo cambiando el mueble del lavabo, el espejo y sobre todo sustituyendo la moqueta por baldosas se ha conseguido cambiar por completo el cuarto de baño.
ANTES
DESPUES
Es tan evidente el cambio que casi no hace falta comentarlo. Lo haremos de todos modos pues la foto superior en B/N no hace justicia. El baño estaba decorado en color rosa y tenía ya muchos años. Ahora iba a ser utilizado por unos hermanos gemelos y el blanco ofrece amplitud, neutralidad y limpieza.
ANTES
DESPUES
Este ejemplo es una buena norma a seguir. Se ha mantenido el encantador suelo de pequeños azulejos hexagonales y simplemente se han cambiado los sanitarios y el recubrimiento de las paredes.
ANTES
DESPUES
El problema que tenían los propietarios con este cuarto de baño era su falta de carácter, algo evidente por cierto. Ellos querían transformar ese espacio anodino en un lugar donde sentirse cómodos y poder relajarse.
ANTES
DESPUES
Este cuarto de baño es un buen ejemplo de que incluso dentro de un mismo estilo las modas son cambiantes. Se trataba de un cuarto de baño decorado en estilo clásico y lo sigue siendo pero no tienen punto de comparación.
ANTES
DESPUES
Un cuarto de baño oscuro y mal iluminado produce una sensación desagradable. La transformación se basó en ese punto básicamente para lograr un estilo clásico pero luminoso y amplio.