Los muros de agua son una solución decorativa que se puede usar tanto en interior como en exterior, aunque por cuestión de espacio los más grandes suelen usarse en exteriores. Son todo un regalo para los sentidos, aportan movimiento, luz y sonido a cualquier jardín, terraza o patio sean cuales sean sus dimensiones. Os mostramos nueve ejemplos a continuación y como veréis hay soluciones variadas para cualquier estilo decorativo.
Los muros de agua de diseño minimalista son los que están formados por una pantalla de cristal sobre la que se desliza el agua. Todos los muros de agua van dotados de un sistema de circulación del agua mediante una bomba con lo cual no tenemos que preocuparnos por el consumo de este preciado bien.
Si preferimos los ambientes más naturalistas podemos decantarnos por muros de agua sobre fondo de piedra e integrarlos en una fuente para tener el efecto de un verdadero jardín de agua.
Como vemos hay soluciones y diseños para todas las circunstancias. Una solución muy original es la que vemos en esta imagen, el muro de agua está integrado en la pared de cristal de la casa. Nos permite disfrutar de una visión relajante incluso cuando estamos dentro de casa.
Si no se dispone de mucho espacio o el presupuesto es reducido no debemos preocuparnos, hay muros de agua de todos los tamaños y como vemos son fáciles de integrar en cualquier jardín.
Si nos gusta el sonido del agua podemos elegir muros de agua con efecto cascada, en estos el agua en vez de deslizarse suavemente por la pared cae con un cierto ángulo lo cual potencia el sonido del agua al caer. Es una sensación muy agradable y relajante.
Hay soluciones con este fantástico elemento decorativo para cualquier tamaño, estilo y presupuesto. El agua en movimiento recrea un ambiente mágico que despierta sensaciones atávicas para el ser humano.
Fotos: furniturezz