Tener un rinconcito para el desayuno, eso que en inglés denominan «breakfast nooks» no es que sea imprescindible pero resulta muy agradable y práctico. Muchas veces también sirve para acabar de rematar la decoración de una cocina cuando tienes la sensación de que le falta algo. Y por supuesto echar un buen rato el sábado y el domingo mientras desayunas tranquilamente es algo impagable. Así que si la idea te hace tilín aquí tienes algunas ideas para crear un rincón de desayuno.
Hay dos elementos que no pueden faltar en un rincón de desayuno, los bancos y las ventanas. Son como si dijéramos los imprescindibles aunque más bien por tradición que por otra cosa pues se pueden sustituir por otras opciones, los bancos, las ventanas es que la verdad acompañan mucho y siempre viene bien dejar que tu mirada descanse en el horizonte.
Aquí tenéis un ejemplo de mínimos, un sencillo banco en L y una mesa no menos sencilla, no se necesita más en realidad pero es un comienzo.
Hasta llegar a elaboraciones tan bien construidas como ésta, llena de elegancia y sofisticación. Una pequeña maravilla donde puedes hacer algo más que desayunar.
Los bancos son una buena idea pues nos ofrecen un buen lugar para sentarse y además nos brindan la posibilidad de aprovecharlos para almacenaje.
Este rincón de desayuno tampoco se queda atrás en cuanto a elegancia y sofisticación. Sobre el sobrio fondo blanco destacan la mesa negra y las sillas de metal.
Tradicionalmente los bancos se abrían por arriba y se usaban a modo de baúl pero podemos ir un paso más allá e integrar cajones con lo cual resultan más prácticos para guardar cosas.
Si la arquitectura acompaña el rincón puede ser tan completo como éste. Papel pintado y paneles de madera para delimitar un espacio de forma bien clara.
Este adorable rinconcito tipo cafetería queda muy bien y aprovecha a la perfección la luz de la ventana. En apenas un metro cuadrado se puede tener todo lo necesario.
Algunos «rinconcitos» son muy desahogados. Éste por ejemplo es adecuado para una familia numerosa o para un montón de visitantes.
Otro ejemplo de elegancia y sofisticación aplicado al campo de los rincones para el desayuno. Muy bien vestido el banco con todos esos preciosos almohadones y fantástica la mesa.
En un estilo contemporáneo también hay lugar para un rincón de desayuno como queda patente en este ejemplo.
El rincón del desayuno es un lugar familiar y donde debemos sentirnos cómodos ante todo. Podemos aprovechar esa informalidad para usarlo de galería para las obras de nuestros pequeños y también para que dibujen y pinten cerca de nosotros.
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Lo principal en el rincón del desayuno, es la luz natural...