Uno de los espacios más importantes de todo hogar que se aprecie es el jardín. El simple hecho de contar con uno es todo un privilegio para propietarios e inquilinos, aunque no basta con disponer de él. A su vez, es importante mantenerlo en buen estado, lo cual supone un gran esfuerzo para aquellas personas que se decantan por las plantas naturales.
Es innegable que proporcionan una gran cantidad de ventajas. Una de ellas se resume en que algunas son capaces de mantener lejos a determinados insectos, siendo un claro ejemplo la lavanda y la citronela. Por otra parte, es de agradecer la renovación del aire que llevan a cabo, dando pie a que respires en un ambiente que es sinónimo de pureza.
Sin embargo, no hay que obviar el mantenimiento que necesitan las plantas naturales. Para ciertos usuarios es un auténtico placer cuidarlas y regarlas de manera periódica, pero para otros acaba convirtiéndose en una tarea tediosa que no pueden realizar por falta de tiempo y/o ganas. ¿Significa esto que no hay que decorar el jardín? ¡Ni mucho menos!
Hoy en día existen varios tipos de plantas artificiales por las que puedes optar. Su principal ventaja guarda relación con el aspecto que acabamos de sacar a colación: no necesitan mantenimiento de ningún tipo. Es decir, su estado es siempre el mismo sin necesidad de que lleves a cabo tarea alguna, siempre y cuando sean modelos preparados para estar en el exterior. Nos referimos a aquellos que no sufren lo más mínimo por la lluvia, la radiación solar, etcétera.
Si aciertas comprando plantas artificiales para el jardín, te olvidarás para siempre de regar, evitar plagas, cortar, trasplantar y otras acciones que hay que realizar cuando se decora un jardín con plantas naturales. Pero lo cierto es que este no es el único motivo que da pie a que sean recomendables.
Como hemos dicho antes, tener un jardín decorado con plantas que sean naturales exige efectuar un mantenimiento prácticamente a diario. Para tal fin necesitas una serie de herramientas: manguera, regadera, pico y un largo etcétera.
El espacio requerido para mantener a buen recaudo este tipo de elementos es considerable. Por suerte, hay múltiples opciones en cobertizos de jardín que son prácticas a más no poder. Pero, ¿qué pasa con esos jardines que no disponen de mucho espacio útil? Para este tipo de casos, las plantas artificiales son las más recomendables.
Al no tener que cuidarlas, no necesitarás los utensilios mencionados en anteriores párrafos. Es por ello que podrás aprovechar al máximo el espacio que tienes a tu disposición en la zona ajardinada de tu vivienda.
Librarte del mantenimiento que requieren las plantas naturales deriva en la obtención de varios beneficios, siendo uno de ellos puramente económico. Y es que a lo largo del año, el gasto en agua es considerable, factor a tener muy en cuenta no solo por el aspecto monetario, sino también por la sequía en la que está sumido el país desde hace tiempo.
Todo lo contrario sucede si colocas en el jardín una o varias plantas artificiales. No necesitan agua, por lo que es una alternativa económica a valorar en una época como la actual de inflación y crisis.
Atrás quedan los tiempos en los que las plantas artificiales pecaban de tener un aspecto visual demasiado irreal. Todo lo contrario sucede en pleno 2023. Los fabricantes hacen todo lo posible para dar forma a conjuntos que, a nivel visual, parecen naturales.
Sus esfuerzos dan frutos en forma de plantas artificiales que, hasta que no las tienes a medio metro, no te das cuenta de que no son naturales. Así pues, visualmente es una muy buena opción para aquellos que quieren decorar su jardín.
Ahora que hemos hablado del proceso de fabricación, hay que decir que durante el transcurso del mismo se utilizan materiales que presumen de una excelente calidad. Ello da pie a que la durabilidad de las plantas artificiales sea máxima, amortizando cada euro destinado a hacerte con ellas.
Por desgracia, las plantas naturales incluso si se cuidan bien pueden acabar muriéndose. Este tipo de situaciones no se producen con las que son artificiales. Incluso los fuertes vientos y la intensa lluvia no afectan a los materiales que están preparados para soportar las inclemencias del clima que tan cambiante es por culpa del calentamiento global.
Teniendo en cuenta todas las ventajas que hemos descrito, no es de extrañar que las plantas artificiales cada vez estén presentes en una mayor cantidad de jardines. Decir adiós al mantenimiento, olvidándose por completo de las tareas a realizar para mantenerlas en buen estado, es el principal motivo que lleva a propietarios e inquilinos a decantarse por esta alternativa.
