La decoración de una casa debe comenzar por dotarla de los suficientes recursos de almacenaje para tener todas las cosas bien ordenadas. El orden es el primer fundamento sobre el que construir la decoración de nuestro hogar. Ninguna decoración, ningún estilo puede soportar el desorden. Así que vamos a ver algunas ideas para mantener un hogar ordenado.
Comenzando por el recibidor, es fundamental disponer en él de los elementos necesarios para tener los abrigos, calzado y demás objetos de los que nos despojamos al entrar a casa bien ordenados. Para que el orden comience en la primera toma de contacto.
En este vestíbulo se ha creado un ambiente de jardín, con un banco pintado en verde y toda una serie de complementos del mismo color pero en distintos tonos. Con diversos soluciones de almacenaje para tenerlo todo controlado.
En la cocina se ha creado un rincón para los pequeños de la casa, con su pequeña cocina de juguete y una pizarra en la pared para que puedan expresarse. Pero todo ello dentro de unos límites, los niños deben aprender la necesidad del orden desde sus primeros pasos.
La zona de comedor de la cocina se convierte en un espacio polivalente donde los niños pueden poner en marcha su creatividad. La bancada de madera, dotada de múltiples cajones, permite tenerlo todo recogido y organizado.
La estantería blanca se ha implementado con estantes de bambú para organizar mejor los juegos de mesa, puzzles y libros de la familia. La nota de color se reserva para los complementos como las almohadas del sofá.
Cuando no se dispone de una habitación exclusiva para que los niños jueguen, se puede reservar un espacio en la sala de estar. La dotaremos de contenedores que hagan juego con la decoración para que los peques mantengan sus cosas bajo control.
Esta habitación infantil se dotó de una buena cantidad de espacio de almacenaje para que en ella imperara el orden. Discreta y funcional, sólo la alfombra aporta un toque de color que le quita seriedad.
La parte inferior de una escalera siempre es un buen lugar para crear una estupenda zona de almacenaje y además sin grandes dispendios. En definitiva se puede tener la casa llena de niños pero ello no es excusa para que impere el desorden, al contrario debemos esforzarnos para que los chicos aprendan la importancia de la buena organización y el orden.