La residencia «Capps» es el ejemplo claro de lo que puede lograr la renovación de una casa antigua. Sus autores, los arquitectos Pottet nos regalan esta transformación.
Por fuera es una bella residencia antigua que puede llamar la atención fácilmente mientras pasamos frente a ella, pero al entrar nos encontramos con una decoración que pueden conquistarnos por sus toques de modernidad.
Si bien ha sido completamente reformada, conserva con bellos detalles arquitectónicos históricos, pero en su interior descansa una decoración moderna que nos regala una sensación hogareña. Acogedora en cada ambiente, un equilibrio justo entre modernidad y detalles clásicos.
Sus dueños son coleccionistas de arte contemporáneo y decidieron transformar la residencia no sólo para adaptarla a sus necesidades sino también para poder exponer algunas de sus piezas de colección. Se pintaron de blanco las paredes y se resaltaron sus pisos de ébano. A primera vista parece ser un museo de piezas de arte contemporáneas.
Hay detalles modernos y personales de los propietarios en todos los espacios y el eje de la decoración está en las piezas de artes que ellos decidieron colocar en cada uno de los habientes.
En esta casa hay una gran variedad de muebles, diversos estilos, y hay detalles muy específicos. Los azulos combinados del baño, las piezas decorativas de la sala, las sillas de la isla de la cocina como los demás detalles de la misma, la pieza de arte que enmarca en estilo del comedor de visitas, y el estudio.
Podrán enamorarse de esta residencia! Qué opinan?
Fotos: poteetarchitects