La clásica marca norteamericana de automóviles, Buick, celebra este año sus 110 años de existencia. El diseñador ucraniano Yaroslav Galant ha diseñado esta cocina conmemorativa, inspirada en los clásicos Buick de la década de los años 50. Aquellos grandes autos americanos con estructura de madera que tanto hemos visto en las películas de Hollywood de aquella época legendaria.
Madera barnizada para que se aprecie el diseño de la veta natural combinada con acero. La línea aerodinámica imita también la de los viejos Buick. Un trabajo que intenta revivir los diseños de aquellos automóviles en una cocina.
Los pequeños detalles automovilísticos, los retrovisores por ejemplo convertidos ahora en pequeños focos luminosos para conseguir los brillos característicos del metal y la pintura de un auténtico automóvil.
El paragolpes del Buick se han convertido aquí en la zona de cocción y el fregadero. Agrandados a una medida adecuada para su función y luciendo toda la belleza de sus formas cónicas elaboradas en metal cromado.
La parrilla delantera del automóvil, la encargada de la toma de aire para refrigerar el inmenso motor Buick se ha transformado también en unos sutiles apliques luminosos. Los armarios de la cocina están hechos siguiendo el diseño del panelado de madera de algunos modelos Buick.
Hasta un sofá para descansar un rato en esta cocina tan dinámica se ha realizado siguiendo el diseño de ese majestuoso parachoques que lucían los Buick de la época. Todo un ejercicio de diseño en honor de la industria automovilística americana que refleja su mejor época, aquellos años 50 del siglo pasado cuando la gasolina era barata y todos los americanos podían disfrutar de sus grandes autos para recorrer su inmensa geografía.
Fotos: hometone.com