Una cocina a color gana en luz y en frescura. Sea cual sea el estilo elegido, podemos llenar de luz nuestra cocina de formas muy distintas, aprovechando las superficies del mobiliario o bien las paredes, suelos y techos. Cada una de estas opciones puede ser una bella solución para conseguir una cocina moderna, menos encorsetada y menos convencional, una pieza más de vanguardia.
Es el caso de las siguientes propuestas, cocinas que se han vestido de diferentes colores para sacar el máximo partido a este espacio. Os ofrecemos una pequeña muestra en gamas muy variadas.
En la primera imagen tenemos una clásica cocina campestre con mobiliario rojo y accesorios en distintos colores (pinceladas que son muy luminosas), mientras en esta otra la propuesta elegida son bloques de color que siguen una escala, a la manera del arco iris:
En un verde manzana de su gama más eléctrica, la siguiente cocina se viste de una belleza única que la conecta directamente con el precioso entorno natural que se aprecia tras las ventanas de la vivienda.
En esta otra gama, una amarillo verdoso, la cocina se convierte en un lugar vistoso y moderno.
En azul y blanco, con toques de rojo, estamos ante una cocina moderna a la que favorece mucho la entrada de luz natural, ya que el azul escogido es un color muy suave que transmite serenidad al espacio.
Esta otra cocina, con un toque pop único, aúna rosa, negro y blanco de un modo muy armónico, haciendo que el espacio se vea cien por cien urbano.
En amarillo mostaza, marrón y violeta, estamos ante un espacio con mucho encanto que juega con sus constrastes de un modo genuino, creando un espacio más romántico.
Fotos: homemydesign.com ; giesendesign.com