El salón es una de las estancias más importantes del hogar, pues en ella pasamos gran parte del día, ya sea solos o en familia. Por tal motivo, es conveniente escoger un estilo apropiado que combine con el resto de la decoración.
Si la decoración de tu salón es aburrida, a continuación te diré cómo renovarla con algún color que esté marcando tendencia.
Si tienes muebles de madera, uno de los mejores colores para decorar el salón es el gris. La rusticidad de la madera y la elegancia del color gris son perfectas para este ambiente de la casa. El gris es un color acromático, al igual que el blanco y el negro, por lo que suele combinar con cualquier color. Además, aporta paz y tranquilidad.
El color azul es uno de los colores primarios más demandados en el mundo de la decoración que está relacionado con el estilo Navy. Sin embargo, no debe por qué estar ligado a los detalles marineros si quieres introducirlo en tu hogar. El azul transmite frescor, favorece el pensamiento positivo y produce un efecto calmante y tranquilizador. Lo mejor de este color es que podrás encontrarlo en diversas intensidades, por lo que no tendrás ningún tipo de problemas a la hora de elegir el tono ideal para decorar el salón.
Si quieres que tu salón se vea moderno, píntalo de morado. Este color combina a la perfección con tonos más claros como el blanco o el crema, lo que le dará luminosidad al ambiente. Además, el morado es uno de los colores más espirituales y de hecho es sagrado en muchas religiones. Este color tiene efectos sobre la mente y los psiquiatras lo utilizan para tranquilizar y calmar a los pacientes, dado que transmite paz y ayuda a combatir los miedos. El morado también se encuentra relacionado con el misterio, la creatividad, la introspección, la fantasía los grandes ideales.
Es uno de los colores más alegres que existen y con él puedes decorar tanto el salón como la habitación o la cocina. El problema, es que puede resultar demasiado cargante si lo utilizas en exceso, por lo que deberías combinarlo con otros colores más claros como el beige o el blanco, o bien usarlo solamente en una pared como pared de acento.