Estas ocho propuestas de comedores en blanco con elementos de madera tienen todas un común denominador: su gusto por crear estilo desde la sencillez y desde los elementos más cotidianos. Un concepto clásico de comedor que se mueve entre varias tendencias a la vez, enlazando con el rústico, el nórdico o escandinavo y los últimos diseños contemporáneos, donde mandan las líneas suaves y las propuestas más moderadas.
Son comedores donde la búsqueda de un equilibrio formal se hace presente: buscan, por encima de todo, la naturalidad y la comodidad, rodeándose de elementos austeros. Se trata de entornos donde no hay estridencias y lo más natural que puede haber en ellos es un pequeño centro de mesa como única decoración. Comedores juveniles, frescos o con un marcado carácter clásico, pero no antiguo. Hay claridad en todos ellos, pues este tipo de superficies tan sencillas quedan expuestas con mucha distinción. Si además añadimos algunas plantas cercanas, el conjunto resultante será más atractivo, aportando más encanto.
Las sillas serán otra pieza del conjunto que marquen también el estilo: las sillas forradas con un poco de terciopelo negro, por ejemplo, ofrecen atmósferas más sofisticadas, mientras que las sillas clásicas de madera serán las preferidas a la hora de construir espacios rústicos con un encanto del pasado. En plástico, entroncan con ambientes más minimalistas y modernos. Se trata de ir dándole al comedor un estilo propio a partir de dos puntos de partida comunes: el color blanco y la madera.