Hay objetos que, por sus características, se enmarcan dentro de los artículos decorativos de estilo vintage-rústico. A veces se trata de reliquias que se conservan durante décadas y acaban pasando de generación en generación. Son objetos, casi siempre de madera, con un valor sentimental único.
Y, además, son de ese tipo de accesorios que crean una magia especial dentro de los ambientes en los que se utilizan. En el caso de los timones de barco y las ruedas de vehículos antiguos, su valor decorativo es tan auténtico que no dudéis de todo lo que pueden aportar a vuestro hogar.
Un timón expuesto en la pared de una sala de estar, de un recibidor o incluso de una cocina, transmite un gran cuidado por el detalle, en este caso por los detalles de estilo náutico. Lo podemos incorporar con tranquilidad a cualquier estilo decorativo, añadiendo un toque muy ecléctico a todo el conjunto.
En el caso de las ruedas, son más propias de exteriores, ya que se suelen relacionar con decoraciones rústicas en jardines, terrazas y patios, e incluso en huertos urbanos.
Las ruedas dan ese toque bucólico y campestre a todo espacio en el que se encuentren ubicadas. Son objetos muy artesanos, que nos relacionan con épocas pasadas y nos invitan a admirar todo su encanto.
Para mayor muestra de lo que decimos, os dejamos con esta rueda de madera convertida en organizador de botellas de vino: encanto rústico y belleza vintage, todo en uno, en un objeto tan práctico como decorativo.
Fotos: decorationtrend.com ; sears.com