Esta casa de 1892 ha sido decorada personalmente por su propietario, en ella ha plasmado su personalidad y su trayectoria vital. La casa es pequeña, apenas 100 metros cuadrados, pero lo que realmente es el carácter de la misma. Hablamos de estilo rústico, pero también podríamos decir vintage o en realidad estilo ecléctico sería más apropiado. Sólo son etiquetas, lo único cierto es que es la casa de Scott y refleja su propio estilo con una combinación de elementos antiguos y modernos. Un recorrido vital, como debiera ser toda decoración, una recopilación de la vida de una persona.
Un magnífico y antiguo sofá en piel y una decoración de pared realizada con pequeños nichos de madera que reúnen una ecléctica colección de elementos decorativos atesorados poco a poco a lo largo de la vida de su propietario.
Objetos diversos adornan la sala de estar, el nexo de unión es el sabor antiguo y el marco de ventana acristalada situada sobre la cómoda es un elemento importante en la decoración de la sala.
La cocina es encantadora, con ese sabor auténticamente rústico. Muebles de madera y encimera de granito componen una decoración tradicional para esta cocina coqueta y llena de color con las flores y las frutas.
Las composiciones florales y vegetales dan un toque campestre y vital a la decoración rústica de esta casa. Aportan color y alegría al resto de la decoración.
El dormitorio también es un cúmulo de objetos recopilados durante la vida del propietario. El cabecero de la cama se ha decorado con otra ventana antigua y un sinnúmero de pequeños recipientes de cristal. Las cajas de cuero son un hallazgo interesante.
Una decoración muy personal y original, las ventanas y puertas constituyen un hilo argumental en la decoración de la casa. También los elementos vegetales van marcando una senda importante en la decoración general.
Fotos: planete-deco.fr