La humedad es uno de los problemas más grandes y clásicos a los que podemos enfrentarnos en nuestro hogar al menos una vez en la vida. Deshacernos de ella puede ser una verdadera complicación y las consecuencias que podemos tener con ellas afectan tanto a la estructura del nuestra casa, la estética y hasta nuestra salud.
Si has tenido humedad en tu hogar sabrás muy bien de lo que hablo. Pero si tienes y no te has ocupado de ella o no sabes qué hacer, este artículo te ayudará a resolverlo.
La humedad en nuestro hogar puede deberse a diversas causas u orígenes. Para saber de ellas tenemos que aprender a reconocerla. La humedad puede ser de origen capilar, por filtraciones o por condensación. La última es una que seguramente ya has experimentado en casa. Es una prácticamente inevitable que hasta podemos provocarla o empeorarla nosotros mismos con nuestras acciones diarias. Sin importar el origen, debemos adoptar o llevar adelante un tratamiento contra la humedad.
Como dije antes, hay que conocer su origen para reconocer qué tipo de humedad tenemos. De ello dependerá dicho tratamiento. Ahora les cuento más en detalle cada tipo de humedad que podemos tener en casa.
Humedad por condensación: un clásico! Va de la mano con el moho. Generalmente podrán reconocerlo por manchas de color verde, marrón o negras. Suelen formarse las esquinas de las estancias como el baño o las habitaciones, en los bordes de las ventanas, dentro de los vestidores y armarios y cualquier otro lugar que no posea una correcta ventilación o aislación del frío. Es muy riesgosa para nuestra salud pudiendo provocar incluso asma y alergias graves. Para deshacernos de ellas podemos adoptar medidas como mantener una buena ventilación del hogar, no generar humedad (ollas sin tapa en la hornalla, secar ropa en el interior del hogar), utilizar el baño con la puerta cerrada para evitar que la humedad salga y mantenerlo siempre ventilado, etc. Es bueno instalar extractores o bien optar, si está dentro de nuestras posibilidades, por la opción de instalar un sistema de ventilación forzada.
Humedad por capilaridad: para reconocer este tipo de humedad en la que podemos ver en la paredes contra el piso. Tiene su origen en una defectuosa aislación en las uniones entre las paredes y los cimientos de la casa. Si vivimos en una casa de dos plantas, sólo la observaremos en la planta baja. Si tenemos humedad en la plata alta es por otras razones. Este tipo de humedad puede provocar problemas en pisos de tipo parquet, zócalos, marcos de las puertas, aparición de salitre, papel pintado englobado, yeso que se desprende o pintura que se deteriora y comienza a caer. En este caso es imperioso realizar un tratamiento eficaz, que termine el problema de raíz.
Humedad por filtraciones: la peor de las tres clases de humedad. Periódicamente debemos verificar cañerías, el techo de la casa y en especial el sótano (si es que tenemos uno en casa). Asimismo, si conoces que otras de las paredes de tu hogar está en contacto con la tierra es necesario efectuar el tratamiento correspondiente para evitar los riesgos de la humedad por filtraciones en conjunto con la humedad por capilaridad.
Conociendo el origen de la humedad que tienes en tu hogar, será mucho más sencillo solucionar el problema. No olvides que siempre es bueno recurrir a profesionales para que la solución y el gasto que realicemos sea óptimo y duradero.