Cuando el frío aprieta no hay nada más agradable que tener cerca una fuente de calor. Pocas cosas son tan icónicas y dan tanta sensación de calor de hogar como una chimenea encendida. Una manera realmente acogedora y reconfortante de mantener a raya el frío invierno es con una chimenea eléctrica, con la que disfrutar del calor y la visión de una de gas o de leña, pero sin los inconvenientes que estas tienen.
Las versiones eléctricas de una chimenea están disponibles con varios diseños y estilos, y se pueden enchufar y tener listas para disfrutar de un lugar cálido en pocos minutos.
Las chimeneas eléctricas son decorativas y contemporáneas, y ofrecen una fuente de calor auxiliar para esos momentos en los que realmente lo necesitamos. Además, también ofrecen la opción de no calentar mientras se disfruta de la visión de las llamas simulando un auténtico fuego.
En comparación con las chimeneas de gas o de leña, las chimeneas eléctricas requieren menos materiales y energía para generar calor. De hecho, son una solución de calefacción eficiente con las que se está ayudando al medio ambiente al no quemar recursos naturales o liberar gases tóxicos a la atmósfera.
Además, con una chimenea eléctrica, el calor se distribuye directamente en la habitación, sin perderse a través de ventilaciones especiales o chimeneas requeridas por otros tipos de chimeneas.
Por último, cabe destacar que una chimenea convencional requiere una gran cantidad de planificación y construcción para lograr el aspecto deseado. Por el contrario, una chimenea eléctrica es una solución con un proceso de instalación sencillo.
Incluir una chimenea eléctrica en la decoración ayuda a crear un ambiente acogedor, perfecto para relajarse, compartir una velada con amigos o crear un ambiente mágico en el dormitorio. También son perfectas para decorar oficinas con un toque elegante.
Las salas de estar y los salones son estancias perfectas para colocar una chimenea eléctrica que acompañe en los momentos de relax o en las veladas con amigos o familiares. No solo ayudará a caldear la sala (si se desea), sino que ayudará a crear un ambiente agradable y acogedor.
Una forma muy interesante de incluir en estas estancias una chimenea eléctrica es con una que tenga soporte de televisor o, si este se cuelga de la pared, colocándola debajo.
También se puede colocar una repisa para chimenea, al estilo de las chimeneas tradicionales de obra, en el estilo que se desee.
Una chimenea eléctrica también puede ayudar a crear un espacio acogedor en el dormitorio. Además de dar la opción de tener un ambiente más cálido, las llamas ayudarán a crear un espacio lleno de magia y encanto.
En la oficina, una chimenea eléctrica puede ser un elemento decorativo que no solo ayude a crear un espacio más cálido, sino también más acogedor y elegante, tanto para trabajar en ella como para reuniones y entrevistas.