La creatividad y el ingenio a la hora de decorar un negocio también pueden ser el mejor reclamo para atraer al público. Construir una estética llamativa y con encanto es uno más de los aspectos que todo buen comerciante tiene que tener en cuenta, pues sabe que así podrá sumar más clientes.
Algunos recurren a su propio criterio y otros prefieren la ayuda de algún estudio de interiores para estilizar su negocio con mayor cuidado. Tal es el caso de esta encantadora vinoteca ubicada en Zurich (Suiza), de nombre «Albert Reichmuth«. Sus dueños recurrieron al estudio autóctono OOS para diseñar el sorprendente espacio interior.
En este espacio nos encontramos con 1.500 cajas de vino de madera sin marcar, colocadas por módulos a lo largo y ancho, desde el suelo hasta el techo. Una idea genial que, como veis, dota a esta vinoteca de un encanto único. Todo un placer para los sentidos gracias al aroma de la madera usada y, por supuesto, del vino.
La idea se basa en la de crear distintas zonas de almacenamiento para exhibir botellas, ordenadas por regiones y cosechas, de tal manera que los amantes de esta bebida puedan curiosear a su antojo y localizar fácilmente sus búsquedas.
Hay también espacio para una zona amplia de cata, donde los sumillers podrán degustar tranquilamente distintas denominaciones de origen en un ambiente espectacular que atrapa los sentidos, especialmente olfativos y gustativos. Delicadeza y cuidado por el detalle es lo que emana esta bonita vinoteca, un lugar de visita para todos aquellos amantes de esta exquisita bebida.
Fotos: inhabitat.com