Una de las tendencias más novedosas se llama ethno chic y combina el encanto decorativo de distintas culturas, fusionándolas en un estilo final alegre y urbano. La inspiración para crear estos ambientes étnicos con encanto puede provenir de cualquier lugar del mundo, no importa de lo lejos que llegue esta inspiración.
Encontramos mucha influencia que proviene de Oriente y Extremo Oriente, de la India, de Marruecos y de otros lugares donde el interior de las viviendas se recrean con un gusto muy marcado por lo ancestral, lo milenario y los elementos más autóctonos de cada geografía.
Los tejidos de estampados están muy presentes: los chales, las alfombras bordadas a mano, las colchas con trabajo de patchwork, las cortinas de inspiración oriental, los mosaicos y el damasquinado… Y los materiales más naturales y flexibles, como la madera o la caña de bambú, forman una parte importante de estos ambientes.
Los detalles artesanales están por todas partes en el ethno chic. Figuras y esculturas que recrean aborígenes o fauna de los pueblos más típicos, lámparas artesanales con trabajo de celosía, macetas y jarrones de gran belleza, cestos de mimbre y cuencos… Todo aquello que nos conecte con la tradición artesanal del modo más natural posible, alejado de objetos modernos.
En cuanto a los colores más abundantes en estos territorios étnicos con mucho encanto, los colores tierra siguen dominando una paleta en la que tampoco faltan el blanco o el gris, aunque a menudo dejan a un lado los colores más vistos de la naturaleza por unas pinceladas de calidez. Rojos, naranjas, amarillos, rosas y fucsias, violetas y azules… aparecen en todo su esplendor para vestir de un mayor aura chic estos ambientes.
Fotos: decocrush.fr