Ideas de almacenamiento para los objetos de los peques Artículo Publicado el 15.03.2014 por Javi
Conseguir tener la casa ordenada cuando entre los habitantes del hogar hay unos pequeños diablillos es toda una hazaña. Pero todo es posible en esta vida y una parte fundamental de la educación de nuestra prole es inculcarles el sentido del orden. Para ello es necesario facilitarles la labor y proporcionarles las mejores herramientas para que puedan almacenar sus juguetes y los útiles que suelen manejar.
Mantener la colección de automóviles de los chicos es muy fácil con esta fantástica idea. Tiras magnéticas donde disponerlos, además les encantará y seguro que el hecho de colocarlos en las pletinas pasará a ser uno de sus juegos favoritos sobre todo si se trata de niños de pocos años.
Los sacos de tela son una opción perfecta para los juegos modulares de construcción. Les permitirá además llevarse con ellos las piezas cuando vayan a casa de algún familiar o amigo.
Estanterías especialmente diseñadas para sus libros favoritos que les permitan tenerlos a su alcance y a la vista.
Esta ingeniosa solución hecha con cubos plásticos unidos mediante bridas es una solución fácil de elaborar y muy eficiente.
Las clásicas cestas metálicas son un elemento decorativo que permiten el almacenaje y les facilita a los peques encontrar sus cosas.
Este punto tiene gran importancia, hemos de facilitarles las cosas y por eso esta idea con cajas transparentes es también una gran idea. Los niños deben poder encontrar lo que buscan al primer vistazo, nos evitamos con ello que revuelvan y creen un caos mayor que el que pretendemos evitar.
Los tubos de PVC son fáciles de trabajar y nos ayudarán no sólo a crear un espacio de almacenaje sino al mismo tiempo crear una fantástica decoración.
Cajas de madera recuperada y acondicionada para la manipulación por nuestros pequeños es otra solución de almacenaje y organización de gran impacto visual.
Para los pequeños objetos que atesoran nuestros artistas domésticos nada como los tarros transparentes. Lápices de colores, ceras, rotuladores y juguetes de pequeño tamaño son fáciles de organizar con tarros de cocina o tarros de conserva reciclados y decorados con figuras de animales.