Decoración de interiores

La decoración africana puede ser creativa, inspiradora y dinámica. Sus colores evocan las selvas tropicales, las llanuras de la sabana, los atardeceres, los amaneceres, los conceptos gráficos de blanco y negro y los mercados locales enérgicos y vibrantes. Si quieres hacer que tu hogar se sienta como en el paraíso, ¿por qué no llevas África a la comodidad de tu hogar con estas increíbles decoraciones de interior?

África es un continente cargado de exotismo que todavía hoy es capaz de enardecer nuestra imaginación. Y si vives en un lugar de inviernos duros y fríos la inspiración africana para tu decoración te ayudará a crear un ambiente más cálido y confortable.

Los colores tierra nos conectan directamente con el color de África, de su tierra y de la artesanía que elaboran sus habitantes. Se pueden combinar con blancos y cualquier otro tono cálido como rojos, marrones, burdeos, ocres y demás colores del mismo estilo.

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La sabana es el ecosistema típico de África, propio de climas tropicales secos. Allí es donde se encuentra esta vivienda de madera, escondida entre árboles, construida en madera y situada muy cerca de un lago. Un lugar especial donde abundan la calma y la tranquilidad. Un lugar mágico para construir esta maravilla de casa, lejos de la civilización.

Los suelos son de madera y el techo de cáñamo, como las clásicas cabañas de bosques y selvas, y la casa queda abierta por completo a este entorno de naturaleza salvaje. Nada más llegar encontramos una impresionante terraza en la que se ubican confortables sillones, mesas y otros asientos ideados para el disfrute en este pequeño paraíso escondido.

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El continente africano está lleno de riqueza cultural, geográfica y antropológica. Tomando elementos de las distintas etnias que lo pueblan, se puede recrear una decoración típica de África, rica en detalles y llena de magia.

Para transportarnos a lo más profundo del corazón africano sin salir de casa, debemos ser fieles a la amplia gama de colores de esta tierra, todos ellos relacionados con la naturaleza: tonos marrones, cremas, negros y naranjas, terracotas… son tonos propios de la tierra y del fuego. Para resaltar detalles, nada mejor como recurrir al azul y el verde, cuyo contraste ayuda a acentuar la belleza de los detalles.

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