La llegada del buen tiempo propicia que saquemos al exterior los muebles más confortables para decorar terrazas, jardines, patios y otros lugares apropiados. La mayoría de estos muebles están realizados en texturas tan naturales como el mimbre, el ratán, las telas sintéticas o el poliuretano, adaptándose perfectamente a la puesta en escena.
Se llevan los tonos terrosos, los grises y ocres, además del blanco. Tonos muy apropiados para veladas largas a la luz de las velas o los farolillos de exterior por lo relajantes que resultan y la naturalidad que aportan al conjunto.
La manera de distribuir estos muebles también es importante, ya que así tendremos la zona preparada para recibir visitas. Por lo general hay que tender a la abundancia de asientos alrededor de una mesa grande, pero si ésta es pequeña se puede acompañar con dos o tres mesitas más para obtener el espacio suficiente.
Si por ejemplo tenemos una piscina, los muebles tenderán más a satisfacer nuestras necesidades de baños al sol, o de tomar el aperitivo junto al agua. En este caso no pueden faltar las tumbonas, hamacas, los puffs y hasta geniales balancines llenos de comodidad.
Para propuestas más modernas, podemos optar por muebles más estilizados en materiales distintos, con formas menos clásicas pero tan confortables como siempre. Una buena forma de conseguir esta comodidad es llenar de cojines y almohadones los asientos. Así el relax estará más que garantizado.
Fotos: furniturefashion.com