Incluye un olivo en tu decoración

Esta nueva tendencia viene, curiosamente, de países en los que los olivos son plantas exóticas. Para nosotros, los que vivimos a orillas del Mediterráneo, nos resulta chocante pues tenemos muchos olivos al alcance de la vista. Pero ello no quita que reconozcamos el valor de un olivo en decoración. Su color verde grisáceo que en ocasiones se torna casi plateado, su crecimiento intrincado y su resistencia hacen que un olivo quede bien en cualquier espacio.

En una decoración de estilo minimalista, ya sea nórdico o no, un olivo de mediano tamaño colocado dentro de una cesta o capazo como éste queda fenomenal. Es realmente curioso que elementos tan alejados geográficamente combinen tan bien. Aquí vemos al olivo en una disposición ideal pues es un árbol mediterráneo y necesita toda la luz que podamos darle más una temperatura suave.

Si lo elegimos en un tamaño pequeño podemos usarlo como cualquier planta de interior y colocarlo en una maceta pequeña sobre un mueble cualquiera. Obviamente si lo tenemos en las condiciones ideales y lo cuidamos correctamente habrá que transplantarlo en algún momento. Aunque al tratarse de un árbol de crecimiento lento tardará un poco en necesitar el cambio de maceta y localización.

Como veréis los entornos para nuestro olivo son muy parecidos. Es en este tipo de decoraciones en las que podemos sacarle el mayor partido a nuestro olivo. Sobre todo en cualquier decoración basada en el color blanco es donde luce mejor un olivo sea del tamaño que sea.

Aquí tenemos uno de un tamaño ciertamente importante pero vemos que sigue siendo fantástico. El olivo nos dará además grandes satisfacciones con su humilde presencia y su suave aroma. Sí, el olor del olivo es muy suave pero te trae recuerdos al aceite de oliva recién exprimido. Un olivo necesita recibir al menos 6 horas diarias de luz solar directa a poder ser pero siempre ha de estar en un ambiente muy luminoso. Sus necesidades de agua son bastante reducidas y los riegos deberemos espaciarlos y sólo lo regaremos cuando el sustrato tenga la capa superior (unos 3 cm aproximadamente) bien seca. Si lo cuidamos bien puede crecer y mucho pero también es verdad que hay formas de contener su crecimiento, pensad que los olivos se usan también como bonsais.