Uno de los
estilos de decoración más populares actualmente es el árabe. Procedente del Norte de África y de Oriente Próximo, es capaz de transportarnos a las «Mil y Una Noches». Con sus ricos colores y su variedad de tejidos y materiales, puede aplicarse fácilmente a cualquier estancia de nuestra casa.
De día, la luz natural inunda cada habitación para por la noche quedarnos con una luz más tenue, procedente de lámparas de forja que la filtran para crear ambientes más íntimos.
Los colores son el elemento que da más carácter a este estilo. Desde las tonalidades terrosas hasta los malvas y violetas, pasando por naranjas, rojos y fucsias. Predominan los matices más cálidos en tapices, cojines y alfombras, que inundan ambientes cómodos y acogedores. En cuanto a los tejidos, siempre naturales, se usan habitualmente sedas y algodón.
La decoración árabe es rica en cuanto a accesorios se refiere, siendo la madera, la forja y la cerámica los materiales por excelencia. En las paredes podremos colocar espejos y lámparas de forja.
Los baños también merecen su atención, el agua es una parte muy importante del culto del mundo árabe. Las celosías pueden ayudarnos a crear un lugar íntimo dejando a su vez paso a la luz. En cuanto al revestimiento de suelos y paredes, es muy común el uso de cerámica tradicional en colores vivos; el lavabo y la bañera pueden convertirse en objeto de todas las miradas.
Ver comentarios
hermosas decoraciones