Con el auge de Internet cada vez son más personas las que pueden trabajar desde casa. Esta posibilidad supone la necesidad de contar con un espacio en donde poder trabajar en buenas condiciones: comodidad, organización, tranquilidad, buena iluminación. El ambiente de trabajo sea en donde sea, tiene que ser el ideal. Si es en casa puede cometerse el error de querer desarrollar tareas desde la comodidad de un sillón o sin respetar horarios. Eso se debe evitar desde el inicio. Trabajar desde casa supone la misma responsabilidad que hacerlo desde otro lugar. Quizás hasta suponga una mayor, si uno es su propio jefe.
Un ambiente especialmente acondicionado para funcionar como oficina es lo ideal para no comprometer la productividad. Las distracciones se deben evitar a toda costa por lo que si se dispone de un espacio independiente sería lo mejor. Lo cierto es que esto no siempre sucede y la oficina en casa a veces se tiene que organizar en otra habitación.
Sea cual sea tu situación, has de contar con lo básico para poder trabajar correctamente: un escritorio, una silla, un pequeño armario o biblioteca para organizar tu material de trabajo. No hay que olvidar la iluminación. En el caso de que no se cuente con una buena iluminación natural esta se deberá sustituir por una buena lámpara de escritorio o de pie.
Delimitar el área de trabajo hará que te sientas realmente en una oficina aunque la misma la tengas que organizar dentro de tu habitación. Y el orden es también un elemento que no se debe pasar por alto. Así como en la oficina de una empresa se procura mantener el orden, en casa tiene que suceder lo mismo.
Quizás lo más difícil de tener la oficina en casa sea la cuestión de los horarios y su cumplimiento. En horario de trabajo te puedes ver tentado en resolver un problema personal o viceversa. Y no menos importante son las distracciones que pueden darse en determinadas habitaciones del hogar, por ejemplo en la sala. La televisión puede ser una tentación pero recuerda que quién saldrá perjudicado eres tú. Organiza bien tus horarios para poder cumplir con tus responsabilidades y para disfrutar de tu tiempo libre.
Si tienes la posibilidad de tener mobiliario de oficina lo más cómodo posible, sobre todo la silla. Si esta es ergonómica, mejor. La postura es fundamental para trabajar cómodamente y para no sufrir molestos dolores de espalda en el futuro.
Si tomas en consideración todo lo anteriormente dicho verás cuanto más productivo puedes llegar a ser.
Vía: www.lojaskdblog.com.br