Los pequeños objetos decorativos son una bonita idea decorativa pero siempre corremos el peligro con ellos de caer en el desorden y el caos. Por eso es importante tenerlos siempre bajo control, usando recipientes de distintos tipos conseguiremos tener nuestras pequeñas colecciones o esos objetos que nos gustan siempre ordenados.
Un bol de cristal transparente es una magnífica opción para guardar pequeños objetos que nos gusten. Arriba vemos una magnífica colección de cajitas de cerillas guardados en un bol de cristal. Están ordenados y además crean un bello efecto con todo su colorido.
Una vieja bombonera puede servir para guardar tarjetas o notas o cualquier otra cosa de pequeño tamaño. Una bandeja de aire retro nos servirá para tener la botella de perfume, el pintalabios, alguna joya, esas cosas que usamos a diario y que así tenemos más a mano y ordenadas.
Guardar las gafas en cajas de almacenamiento destinadas para ellas nos permitirá mantenerlas siempre a punto y sobre todo en su lugar. Cuando almacenamos ropa de cama o de baño en estantes a la vista podemos usar cintas para atar las diversas piezas.
El orden, no hay que olvidarlo jamás, es la base de cualquier decoración. Ningún estilo decorativo puede ser bello si no hay orden en su plasmación. Pero quitar las cosas de la vista, sobre todo cuando son pequeñas, las puede llevar al olvido. Es muy interesante, casi imprescindible, marcar las cajas, maletas o cualquier sistema de almacenamiento que usemos con su contenido. Podemos usar etiquetas o cintas que envuelvan cajas y demás elementos de almacenamiento para detallar lo que contienen.
Un sencillo estante hecho con escuadras de madera y una pequeña pieza de mármol nos dará un lugar donde guardar esos elementos de aseo que usamos a diario y cabe en cualquier rincón del cuarto de baño.
Fotos: maisonetdemeure.com