A pocos días de comenzar el esperado mes de julio, son muchas las familias que tienen la gran suerte de poder disfrutar de unos días de vacaciones fuera de casa.
Una vez que tengas las maletas con todo lo necesario ya guardado, deja para última hora sólo lo imprescindible, y dedica un tiempo a preparar la casa para tu ausencia.
Las habitaciones que den a patios de interior, las puedes dejar con alguna ventana algo abierta, favoreciendo así el tránsito del aire y evitando que acumulen olor a encierro y hasta humedad.
Para evitar que los muebles se estropeen a causa del polvo o la pérdida de color que producen los rayos solares, puedes tapar aquellos más sensibles con fundas o sábanas que ya no utilices.
Del mismo modo, elementos como colchas y edredones que también pueden perder el color, conviene que los retires y dejes en las camas las plumas o, directamente el colchón.
Para evitar desastres, es imprescindible que te asegures de que las llaves de paso de la luz, el gas y el agua, queden completamente cerradas.
Asimismo, es conveniente que dejes tus llaves a algún vecino o familiar de extrema confianza, por si estos accidentes ocurrieran en otro piso de tu edificio y así poder entrar a evitar daños mayores.