Cuando tengas un momento para dedicarlo a ti no optes por otra cosa que no sea salir a tu jardín y desconectar, es un lugar especial donde poder hacerlo. Deja que el ruido del agua te transporte a un lugar donde no existen preocupaciones y donde la calma es la base. Aquí te damos todas las claves para conseguir tu jardín japonés, zen o de estilo feng shui. El estilo que tanto se lleva.
Números impares, todos los elementos que vayamos a colocar tenemos que ponerlos en cantidades impares. Es decir, si ponemos árboles, debemos plantar 1,3,5.. Hay que colocar rocas de diferentes tamaños, colores y texturas. Así como piedras planas. También debemos colocar arena o grava y pasar un rastrillo de vez en cuando. Hacer esto relaja a la vez que al hacer ondulaciones en la arena nos da la sensación de que es agua, con lo que relaja aún más.
Utilizar agua: bien con estanques, peceras, recipientes con agua o fuentes. Por supuesto, como es un jardín natural es fundamental que haya plantas. Podéis elegir cualquiera de las plantas de exterior, sobre todo aquellas que sepáis cuidar bien.
Diseños asimétricos. Los diseños asimétricos cambian nuestra vida cotidiana y por ello es bueno que lo tengamos en los jardines, ya que rompen la monotonía y la simetría diaria. No hay que poner demasiados elementos, ya que según este estilo hay que sacar los innecesarios para que la imaginación también vuele.
Una de las bases también consiste en que el material que tenemos a nuestra disposición deberá ser utilizado en el jardín y no al revés. Es decir, no tenemos que hacernos una idea preconcebida y a partir de ahí intentar comprar aquello que necesitamos para conseguirlo, lo mejor es partir de la situación anterior aunque siempre habrá cosas que deberemos comprar.