Os invitamos a ver una estupenda labor, la que se ha realizado en la decoración de este apartamento en Mallorca, aunque han contado con la colaboración estelar, nunca mejor dicho, de la luz que baña esa isla del Mediterráneo. Esa luz especial que lo invade todo, que no deja rincón por alumbrar.
La zona de descanso, sofá en tela gris y metal. Pequeñas mesitas auxiliares en metal también, madera en el suelo y esas ventanas infinitas también con la carpintería en madera. Elementos básicos muy bien coordinados.
Otra perspectiva, en la que podemos admirar cómo las palmeras parecen querer asomarse a otear el interior del apartamento cual gigantes curiosos. Es realmente una maravilla tener esos ventanales en un lugar como Mallorca.
Una nueva vista del apartamento, en esta ocasión podemos apreciar la zona de comedor con la mesa y las sillas elegidas para dicha función. Una vez más se decantan por la madera y las fibras vegetales.
Detrás de la zona de comedor queda la cocina en blanco y acero, con la zona de trabajo situada en forma de barra cara al resto de la estancia.
Los detalles de la pequeña cocina son interesantes, armarios con puertas a ambos lados de la barra, en la zona de lavado se ha instalado un recubrimiento translúcido para proteger la pared.
En el dormitorio se ha aprovechado la altura considerable de los techos para construir un altillo donde instalar otra cama. La cama principal con su gran cabecero en madera llena por sí sola la habitación.
Vista desde la que se puede apreciar el altillo que aporta espacio útil a la habitación. Se accede a él con una escalera de madera con escalones ergonómicos. Debajo del altillo se ha aprovechado el hueco como pequeño vestidor.
El cuarto de baño con las puertas en cristal y mueble del lavabo en madera y acero. Un buen aprovechamiento del espacio disponible y esa luz que engrandece cualquier lugar hacen de este pequeño apartamento todo un lujo.
Vía: Planete-deco