Este curioso hotel está construido con contenedores de transporte, 35 en total ha usado Tonghe Shanzhi Landscape Design para crear este hotel de cinco estrellas. El Xiang Xiang Pray House se encuentra en Nan Dazhan Cun, China. No resulta sorprendente que en China se haya construido un hotel con contenedores, ya que es el país con el mayor tráfico marítimo de contenedores. Por sus puertos pasan 165 millones de contenedores al año.
Este original y ecológico método de construcción ha ahorrado un 30% de residuos respecto a una construcción corriente. El ahorro en agua y hormigón respecto a una construcción típica ha sido de un 60%. Además para reducir el impacto medioambiental los contenedores están pintados con pintura al agua.
Consta de 21 habitaciones, el hotel también dispone de vestíbulo, restaurante, jardines y salones de eventos. Los huéspedes pueden elegir entre dos tipos de habitación, las menores hechas con un contenedor y las grandes hechas con dos contenedores. Los interiores están acabados con paredes pintadas en gris azulado, luces empotradas, suelo de baldosas y muebles de madera.
Cada contenedor-habitación ocupa una pequeña parcela recubierta de césped. Las distintas habitaciones se comunican por caminos recubiertos de baldosas, tanto entre sí como con la recepción, la cafetería y otras partes del hotel.
Arriba vemos la cafetería y en las fotos inferiores, el espacio para eventos y reuniones, amueblado con mesas para la celebración de la ceremonia del té.
La habitación doble cuenta con una claraboya en el techo del contenedor para poder admirar el cielo nocturno. Los acabados en madera están realizados al estilo tradicional chino pero con una gran inspiración moderna e internacional.
Un curioso recurso el utilizado en la construcción de este hotel, aunque no es el único hotel del mundo realizado con contenedores de transporte. El Bayside Marina Hotel diseñado por Yasutaka Yoshimura Architects, en Yokahama, Japón, también está construido con contenedores de transporte pero en este caso apilados de dos en dos.
Vía: interiorholic