Vivir en 22 metros cuadrados no implica siempre condiciones miserables y pobreza. Al contrario, en este ejemplo que os presentamos podemos ver que se puede vivir no sólo dignamente sino también rodeado de lujo y belleza. El pequeño apartamento se encuentra en Suecia y está decorado con gran elegancia y distinción.
El apartamento está decorado en blancos y negros. El blanco como color principal es el que ocupa más espacio, el negro aporta contraste y definición. La cocina en negro es una pequeña joya de sotisficación y elegancia, situada en un ángulo del apartamento se diferencia como zona independiente gracias al uso del color.
La cama se convierte en un elemento de decoración muy importante pues lógicamente ocupa una parte importante de la vivienda.
Detalle de la cocina toda en negro, muebles, azulejos y la encimera en granito negro. Rezuma sofisticación por toda su pequeña extensión.
El suelo en mármol de carrara, importado directamente de Italia, marca la diferencia y aporta un plus en la decoración de esta pequeña joya sueca. El fondo de la habitación oculta el ropero, se ha panelado con espejos que dan sensación de profundidad y amplitud.
La mesa es multiusos, para trabajar y para comer. Los paneles blancos del fondo ocultan el frigorífico y el congelador.
El baño es la única pieza separada de la estancia principal y única, se han recubierto sus paredes con mosaico negro.
El plano del apartamento, en él se puede observar cómo se ha tratado de dejar el mayor espacio posible en el centro, dejando los laterales para servicios, cocina, baño, ropero…
Vía: planete-deco