La mesa Homework es obra del diseñador eslovaco Tomas Kral y su aspecto resulta como poco chocante. Esta mesa ha sido diseñada como mesa de trabajo y desde luego tiene la apariencia de ser una mesa de trabajo ideal. Es amplia, 150 cm x 80 cm, con lo cual puede acoger perfectamente un ordenador y dos monitores con facilidad.
Elaborada con madera y metal transmite la sensación de ser una mesa práctica para trabajar. Su solidez es a prueba de bombas, con ese tablero formado por un sandwich de madera y aluminio tiene que soportar lo que le echen.
Una mesa moderna y adaptada a las nuevas necesidades de los usuarios, cuenta con un canal en una de las patas traseras por donde pasar el cable de la electricidad. Solución cada vez más presente en las mesas de trabajo, aunque la verdad es que ha costado bastante que los diseñadores se preocuparan por los cables, ya que hoy día todo escritorio o mesa de trabajo se va a ver irremediablemente poblado de aparatos electrónicos.
Lo más característico y que le otorga un plus de exclusividad a esta mesa es el curioso «canalón» metálico que la rodea por todas partes menos por una, como si fuera una península. En este añadido se pueden colocar libros, objetos diversos, colgar la chaqueta, colocar un rollo de papel o tela, la verdad es que se puede usar para infinidad de cosas.
No creo que esta mesa deje a nadie impasible, o gusta mucho o no gusta en absoluto. El diseño arriesgado de esta mesa la sitúa en el límite incierto de la gloria o el fracaso. Veremos con el tiempo hacia dónde se decanta el fiel de la balanza.
Fotos: uuldesign.com